Considerada la cuna de la civilización Europea, la impronta cultural que Grecia ha dejado en occidente no tiene parangón. Los griegos hicieron grandes contribuciones a las matemáticas, la astronomía, la medicina, la filosofía, la arquitectura, la escultura y la literatura, entre otros.
Acompáñanos durante un interesante viaje por el esta histórica península y sus más de 1.400 islas.
Indice
Geografía física y relieve
Grecia es un estado peninsular dentro de la Europa meridional, que dispone de una sección insular, situada en el extremo sur de la conflictiva península balcánica, y otra insular, compuesta por 1400 islas, algunas de tamaño apreciable, como Creta, Lesbos o Chios. La parte continental también es mencionada como la Península del Peloponeso, que limita con el mar Jónico, Egeo y, por supuesto, el mediterráneo, entre las regiones de Albania y Turquía, con la que mantiene unas relaciones diplomáticas muy tensas.
Por tierra, hace frontera con Macedonia del Norte, Bulgaria, Turquía y Albania, cubriendo una superficie de 131.940 km², en los que se incluyen las aguas interiores de la cuenca del Egeo, islotes e islas.
La orografía griega es predominantemente montañosa. Tanto es así, que es el país de Europa con un mayor número de picos montañosos. Las cadenas más relevantes son los Alpes Dináricos, ubicados al oeste, y los montes Ródope, sin olvidar la cadena de Pindo, que se encarga de separar Epiro de Tesalia. Encontramos la elevación más pronunciada en la cadena del Olimpo, concretamente en el monte Mytikas, con 2.919 msnm, posicionándose como el quinto pico de Europa más alto, solo superado por el Mont Blanc, Aneto, Mulhacén y Etna. Dentro de su territorio le siguen de cerca el Smólikas, el Grammos o el Giona.
Clima
Típicamente, el clima griego se considera de carácter Mediterráneo, algo que viene impuesto no solamente por el registro de temperaturas y precipitaciones, sino por su geografía y litoral, aunque no deja de ser un clima variado, con otros microclimas en función de la región en la que nos encontremos. Podemos distinguir básicamente tres tipos de clima, a saber: mediterráneo, alpino y templado.
- Mediterráneo: Definido por inviernos húmedos y templados, en contraposición a los veranos secos y calurosos. Ocasionalmente, se producen algunas nevadas, que cubren con su manto Creta, Cicladas o Atenas, dibujando una preciosa estampa.
- Alpino: Se encuentra sobre todo en la Grecia Occidental, amén de en las partes céntricas del Peloponeso, y es, como su propio nombre indica, un tipo de clima de alta montaña, con una temperatura media anual tirando a baja, con bastantes precipitaciones.
- Templado: Más habitual en la región de Macedonia Central y Oriental, con inviernos muy húmedos y termómetros bajo cero, sucedidos seguidos por veranos secos y cálidos. Las regiones más frías son las del norte y el interior.
Flora
Los griegos quizá no fueron excelentes jardineros, pero sí más que destacables botánicos. Aproximadamente el 30% del país está tupido por bosques con vegetación abundante, en los que se pueden observar desde coníferas alpinas, hasta la típica vegetación mediterránea.
Diferenciamos ocho biomas que dan refugio a 5.500 especies de plantas. A grandes rasgos, las zonas bajas están formadas por almendros, granadas, naranjos, olivas, higueras y vid, mientras que en los terrenos situados a mayor altura vemos más abundancia de pinos, castaños y robles. En zonas más montañosas, que se elevan sobre los 1.070 msnm, empiezan a ser frecuentes las hayas y los abetos.
Fauna
La biodiversidad de Grecia es espectacular, debido, entre otras cosas, a su microclima mediterráneo y sistemas montañosos. Habitan 116 especies de mamíferos, 422 aves, 60 reptiles, 20 anfibios y 126 peces en los mares que circunvalan el país.
Cuentan con algunas especies autóctonas únicas en el mundo, y de extraordinaria belleza, como la tortuga boba y las focas pinípedas. En la densidad de sus bosques se camuflan animales como el corzo, el lince y el oso pardo. La cabra salvaje, bastante infrecuente en otras zonas de Europa, aún sobrevive en muchas de las montañas e islas griegas.
Características económicas
Pese a que Grecia está un considerado un país desarrollado, con unos altos estándares de calidad de vida, y se sitúa como la 50ª economía más grande del mundo, y la 15ª dentro de la Unión Europea, ha sufrido en los últimos años un embiste económico que ha dejado maltrecha la calidad de vida sus ciudadanos.
Basa su economía en el sector servicios, que representa un 85% de su músculo financiero, quedando muy lejos del mismo, con el 12%, la industria, y aún más, del sector primario, que apenas supone el 3%.
El turismo es una de las piedras angulares de su economía, algo que trasluce en el número de turistas internacionales, que anualmente alcanza más de los 16 millones. La industria marítima es otra de las grandes bazas del país heleno, con un sector naviero pujante.
En su entorno, sí tiene una posición de mando dominante, ya que su economía es más grande que la de todos los países bálticos juntos, siendo, por razones meramente geográficas, el segundo inversor más valioso de Albania, y el tercero de Bulgaria, Serbia y Rumania.
La crisis que sacudió Europa en el año 2008, dejó severas cicatrices en su economía, con una caída de su PIB del 25%. Al mismo tiempo, la deuda pública se disparó hasta llegar al 181,2%, una situación que comprometía la permanencia de Grecia en la Unión Europea. Tuvieron que tomarse medidas de urgencia, determinadas por los tecnócratas como de austeridad, recortando pensiones y gasto público.
Características políticas
La democracia surgió en Grecia, como fruto de un pacto entre clases nobles y populares que conjuraron contra la tiranía de la oligarquía. El mérito hay que concedérselo a Clístenes, al que se considera padre fundador de la democracia ateniense.
Oficialmente, en la historia temprana, y desde el 1 de junio de 1975, Grecia es una república democrática parlamentaria, habiendo rechazado la monarquía en plebiscito popular el 8 de diciembre de 1974.
En el sistema electoral griego, el voto es obligatorio para los mayores de 18 años. En cuanto al reparto de poderes, se establece un poder ejecutivo, dirigido por el jefe de Estado y un presidente, el cual es encumbrado por el Parlamento Helénico. Además de estos representantes, existe la autoridad del jefe de gobierno. Curiosamente, el sistema legal que protege el derecho de los ciudadanos griegos, mama directamente del código romano, al igual que en otros herederos del Imperio.
Características históricas y culturales
La historia de Grecia daría para escribir miles y miles de páginas, resultando inagotable. Las primeras evidencias de presencia humana en el país se hallan en la caverna de Petralona, donde se encontró un cráneo que recibió el apelativo de hombre de Petralona, con una datación que, aún a día de hoy, es discutida por los expertos.
Grecia, conocida a menudo como el país heleno, uno de los pueblos que según Heródoto y Tucídides constituyeron el país, es considerada la cultura que alumbró la civilización occidental. Tuvieron una marcada influencia sobre el Imperio Romano, que difundió su cultura por todos los territorios europeos, norte de África y Oriente Próximo. La influencia de los griegos está presente en infinidad de ámbitos, desde la política, la educación y la filosofía, hasta las ciencias y las artes. No en vano, la corriente renacentista, impulsada en los siglos XV y XVI, mama directamente de la cultura griega clásica y romana, resurgiendo en una nueva época de esplendor a través del neoclasicismo, entre los siglos XVIII y XIX.
Tradicionalmente, Grecia fue un país marítimo, comercial y expansivo. Esta realidad histórica vino motivada por una configuración geográfica concreta, considerando de especial relevancia las características físicas del sur, en la península de los Balcanes, con un relieve accidentado que dificultaba enormemente el desarrollo de la actividad agrícola, además de entorpecer las comunicaciones internas. Por el contrario, su extenso litoral favorecía su expansión hacia ultramar. Las sucesivas olas de inmigrantes aqueos, jonios y dorios, que propiciaron un aumento de la presión de la demográfica, hicieron el resto. Para la mayoría de historiadores, los Juegos Olímpicos Antiguos, celebrados en el año 776 a.C, señalan inequívocamente el comienzo de la Antigua Grecia como entidad histórica.
Tal y como hemos mencionado, Grecia es considerada, sin ningún género de dudas, la primera civilización occidental con la civilización cicládica, seguida de la civilización minoica, y más tarde, la civilización micénica.
Sin duda, el periodo histórico verdaderamente atractivo corresponde al helenístico y romano, con la perdurable figura de Alejandro Magno, el más importante de los iconos culturales de la Antigüedad, y uno de los más aguerridos conquistadores de la historia de la humanidad. Es evidente que su historia ha confluido de manera irremediable con su cultura, iniciada en la Grecia micénica y, especialmente más notable, en la Grecia clásica, que aún a día de hoy es objeto de estudio e interés.
El tan cotidiano teatro nació en Grecia, en la ciudad de Atenas, presentándose en primera instancia como parte de un festival llamado dionisias, en honor del dios de la fertilidad y el vino: Dionisio. Nacieron así tres géneros dramáticos en orden cronológico: sátira, tragedia y comedia. Más tarde, durante el periodo bizantino, el teatro entró en franco declive, situación propiciada por la hostilidad del Estado. Por otra parte, muchos de los restos arquitectónicos de la Antigua Grecia aún perduran, estando perfectamente documentados.
Mención especial a su gastronomía como ejemplo perfecto de la apreciada dieta mediterránea. Las influencias turcas y balcánicas, se hacen notar en algunos de sus platos, en los que prevalecen los vegetales, principalmente los tomates, patatas, judías verdes y berenjenas. La carne de cordero, el pescado y el aceite de oliva, son buques insignia de su rico recetario.
Finalmente, no podemos dejar pasar la oportunidad para referirnos a su pintura y escultura, ante todo esta última, con los maestros Fidias y Praxíteles.
Características lingüísticas
El primer paso para considerar a un pueblo civilización, viene anticipado por la aparición de la escritura. La lengua demótica o vernácula, además de ser la lengua indoeuropea mejor documentada, es la más antigua del continente. 3.400 años de evidencia escrita avalan esta afirmación, con un alfabeto, el griego, que ha trascendido hasta nuestros días.
Sería imposible entender el canon occidental sin los poemas épicos de la Odisea y la Ilíada, las obras de Aristóteles o los diálogos Platónicos. Tampoco podemos pasar por alto que la Biblia se escribió por primera vez en griego koiné, un idioma que todavía forma parte de las liturgias en algunas confesiones religiosas del país. Los estudios clásicos no podrían entenderse ni tomar cuerpo, si no fuera por el griego.