Cuando dos o más personas mantienen distintas opiniones y/u objetivos, se origina un desacuerdo, que puede desencadenar una disputa cuyo fin es imponer la opinión propia en sus contrapartes. La mejor manera de solucionar estos tipos de conflictos suele ser recurriendo a la empatía y la colaboración.
Pero, además, los conflictos también pueden darse involucrando a un solo individuo, cuando existen incongruencias entre su forma de pensar y actuar. Ante esta clase de conflicto, lo mejor es hacer un ejercicio de introspección para conocerse y, por supuesto, tratar de ser más comprensivo con uno mismo.
Veamos a continuación quince modalidades de conflicto, con sus respectivas características definitorias.
Indice
- 1 Conflictos intrapersonales
- 2 Conflictos interpersonales
- 3 Conflictos de grupo
- 4 Conflictos ideológicos
- 5 Conflictos políticos
- 6 Conflictos religiosos
- 7 Conflictos filosóficos
- 8 Conflictos armados
- 9 Conflictos de falta de información
- 10 Conflictos de relación
- 11 Conflictos de intereses
- 12 Conflictos de valores
- 13 Conflictos estructurales
- 14 Conflictos laborales
- 15 Conflictos escolares
Conflictos intrapersonales
Ocurre cuando una persona no tiene coherencia entre su forma de actuar, de pensar y de sentir. Se le adjunta el prefijo intra porque dichos conflictos se producen en el interior de la persona, es decir, en su mente, y raramente se reflejan en el exterior.
Claro está, sí que se manifiestan las consecuencias derivadas del conflicto interno, pero no el conflicto en sí, que suele quedar relegado a un diálogo interno.
Conflictos interpersonales
En contraposición al anterior tipo de conflicto, estas discusiones se desarrollan entre dos personas. Generalmente se produce por poseer cada una de ellas una forma de pensar diferente en algunos aspectos, lo que origina el choque. En la mayoría de los casos, los conflictos surgen desde las emociones.
Adicionalmente, esta clase de conflicto puede ser:
- Conflictos unilaterales: una sola de las partes tiene un problema con la otra persona.
- Conflictos bilaterales: ambas partes tienen problemas con el otro, lo que suele agravar el conflicto.
Conflictos de grupo
Están conformados por aquellas discusiones que se generan en un grupo de personas. En estos casos, al estar involucrados tantos individuos, las razones pueden ser muy variadas. Con frecuencia, por una mala comunicación y/o entendimiento de lo que desea comunicar cada interviniente.
Conflictos ideológicos
Se observan dos partes que se encuentran enfrentadas por su propósito de defender su posición ideológica. Una de las principales finalidades de cada contendiente suele ser tratar de convencer al otro de que su proposición es la correcta, objetivo que raramente se logra al existir la tendencia de ponerse a la defensiva y atacar de forma personal al oponente, ya sea directa o indirectamente.
Bajo ciertas circunstancias que incluyen una posición de poder, estos pueden llegar a derivar en un conflicto armado.
Conflictos políticos
Estrechamente relacionados con los conflictos ideológicos pero már orientados a la acción, este tipo de conflicto surge cuando dos o más partidos políticos intentan imponer o tomar el control de un estado, bien sea en el ámbito económico, territorial o político.
Lo más delicado es que estos conflictos suelen anticipar guerras o conflictos armados.
Conflictos religiosos
Suceden cuando dos personas que pertenecen a un mismo culto discuten entre sí, o cuando dos cultos opuestos tienen opiniones muy marcadas y diferentes. La mayoría de ellos son producto de las doctrinas que se inculcan y su final, en muchas ocasiones, puede llegar a ser violento.
Conflictos filosóficos
Se produce ante la aparición de un grupo de personas con formas diferentes de pensar, pero que en su interpretación de las cosas suelen excluir las opiniones de los demás.
Si bien pueden generar conflictos muy acalorados, no suelen derivar en mayores consecuencias, pues el mundo de la filosofía tiende a ser bastante abstracto, lo que facilita la comprensión de que pueden existir y existen diversos puntos de vista cuya verdad absoluta es indemostrable.
Conflictos armados
Es una clase de disputa que, generada por grupos militares o paramilitares, busca obtener algo, como un territorio o acceso a cierto poder y/o recursos por la fuerza.
En este tipo de conflictos, se descarta el diálogo y se opta por la violencia.
Conflictos de falta de información
Acontecen en las situaciones en las que hay cierta carencia de información que imposibilita una correcta toma de decisiones. También se puede considerar como tal al simple hecho de estar malinformado sobre un tema en particular.
A su vez, estos pueden llegar a clasificarse en:
- Conflictos innecesarios: se producen cuando las partes implicadas no poseen la información suficiente para dilucidar un determinado asunto.
- Conflictos auténticos: se desata cuando la información que posee cada una de las partes resulta incompatible con la del oponente, normalmente derivado de diferentes procedimientos para recoger datos.
Conflictos de relación
El conflicto de relación suele tener su origen en una comunicación deficiente entre las personas involucradas en el mismo. Es habitual ver cómo todo comienza con una actitud pasivo-agresiva que mantiene relativamente ocultas ciertas disconformidades y emociones negativas, lo que de manera frecuente termina desembocando en resentimiento y una sobrerreacción negativa.
Conflictos de intereses
Los conflictos de intereses se dan en el ámbito de las relaciones, ya sean estas personales o laborales, cuando se considera que una de las partes orienta sus esfuerzos en pro de su propia satisfacción, en detrimento del bienestar o los intereses del grupo.
Conflictos de valores
Acontece cuando se da una incompatibilidad o discrepancia entre las creencias de dos o más individuos. Esto nos podría hacer pensar que estamos ante un conflicto religioso, pero no es así. Esta clase de conflictos tiene más que ver con los principios y la ética.
Dicho de otra manera, lo que para una persona podría ser valorado como moralmente correcto, para otra podría constituir una mala acción o pensamiento.
Conflictos estructurales
Un conflicto basado en factores estructurales, implica que existen ciertos condicionantes negativos que tienden a perpetuar desigualdad, explotación, etc. Al ser de tipo estructural, lo habitual es que resulte más complicado resolverlos.
Conflictos laborales
Se producen en el ámbito del trabajo y suelen tener mucho que ver con la apreciación, por una o varias partes, de que existe una desigualdad o injusticia frente a otros trabajadores de su entorno.
Conflictos escolares
Al igual que con el anterior tipo de conflicto laboral, los conflictos escolares reciben su denominación por la esfera en la que se producen; en este caso, en el mundo escolar.