¿Qué es el pensamiento?
El pensamiento es la facultad de conocer, comprender los aspectos generales y universales de las cosas, sin depender de manera inmediata, y de vez en cuando, de las cosas individuales y los aspectos aislados con los que se nos aparecen.
También, se trata de la capacidad de captar lo real por «abstracción». Por ejemplo, con la palabra «manzana», todas las manzanas del mundo se pueden entender e identificar, incluso si cada una puede ser diferente de la otra. Además, el concepto de «manzana» significa un vasto complejo de elementos estrechamente integrados: forma, color, volumen, peso, etc.
¿Cuáles son las características del pensamiento?
- El pensamiento está presente en todo fenómeno consciente: es la actividad que percibe, elabora recuerdos, coordina imágenes, abstrae, compara, juzga, razona.
- Tenemos un pensamiento perceptual que nos pone en contacto con los eventos que suceden en nosotros y en el mundo exterior; uno imaginativo que representa los datos percibidos o evocados por el pasado; uno asociativo que establece un cierto orden entre los diversos fenómenos psíquicos; uno afectivo que elabora las manifestaciones de nuestra afectividad; uno volitivo que preside cualquier acción voluntaria.
- Se eleva por encima del mundo de las percepciones para formar esquemas generales que son conceptos; capta las relaciones y transforma el material suministrado por los receptores sensoriales en un sistema de juicios, a través de un proceso de análisis y síntesis (razonamiento).
- La formación de conceptos. La presuposición necesaria para la formación del razonamiento es el concepto: un término utilizado para referirse a un símbolo abstracto y general que contiene todas las características más relevantes, comunes a un determinado grupo de objetos o eventos.
- Los conceptos se forman porque nuestro pensamiento separa en realidad lo que es útil o esencial de lo superfluo, es decir, las características constantes de las variables. Reconocemos y clasificamos objetos basados en conceptos.
- Pensamiento como un juicio. Se habla de juicio explícito cuando la percepción (que en sí misma también puede constituir un juicio implícito) se pasa a una reflexión consciente, expresada verbalmente o por escrito o de manera gestual.
- La actividad judicial consiste en reunir dos percepciones o dos imágenes o dos conceptos, estableciendo una relación entre ellos. Juzgar significa unir dos términos con una afirmación, o separarlos con una negación.
- El pensamiento está estructurado durante la edad evolutiva, en relación con la maduración física y mental progresiva del individuo.
