Júpiter es el más gigante de todos los planetas que componen el Sistema Solar. Está constituido, sobretodo, de hidrógeno y además de helio, ambos en un estado gaseoso. Este planeta tiene un diámetro de 142.984 km. Júpiter está rodeado por unas 79 lunas.
Entre las que más se destacan están:
- Europa,
- Ío,
- Calisto,
- Ganímedes,
- Amalthea o Amaltea,
- Himalia,
- Thebe,
- Elara,
- Pasiphae,
- Carme,
- Sinópe,
- Lysithea,
- Ananke,
- Adrastea,
- Leda y Callirrhoe,
- entre otras.
Júpiter es el mayor de los llamados planetas jovianos cuya masa está constituida, en su mayoría por gas, además, gas comprimido tanto en estado líquido como en hielo. Estos planetas se denominan jovianos porque tienen características similares a Júpiter. Dentro de estos planetas están Júpiter, Saturno, también Urano y Neptuno.
El término joviano hace referencia a Júpiter. Joviano es el adjetivo con que se califica a lo que proviene de Júpiter. Los planetas, en sentido general, y Júpiter que es el tema en cuestión a diferencia de estrellas o de constelaciones, que siempre permanecen casi fijas en el universo y sólo regidas por el denominado movimiento sidéreo, los planetas siguen con su movimiento orbital en torno al Sol.
Eso provoca que por meses y hasta años vayan recorriendo las distintas constelaciones que sobrepasa la eclíptica, la misma dirección que sigue el Sol en el espacio.
El origen de la palabra “planeta” proviene del griego antiguo y quiere decir “objeto errante”, queriendo significar el movimiento de estos planetas entre las estrellas. Cuando ocurre que dos planetas como Júpiter y Saturno, o también un planeta y otro cuerpo brillante que puede ser un satélite como la Luna o cualquiera de los satélites de Júpiter, se encuentran en una misma zona de la eclíptica, se habla de que ha ocurrido una conjunción.
Características de las lunas de Júpiter
Europa
La luna Europa es 90% más grande que la luna de la Tierra. El hielo de su superficie tiene varios kilómetros en su espesor y esconde un océano que líquido, además mantiene la calefacción que se produce por las fuerzas que lleva la marea por su proximidad con Júpiter. Europa tiene un diámetro de 3.122 kilómetros.
La sonda Galileo reveló que en la superficie de esta luna hay cristales de sulfato de magnesio muy similares a los que existen en la Tierra en los lagos que son secos. Recientemente, la NASA ha observado un cráter de unos 30 kilómetros de diámetro, unas 18,5 millas.
ÍO
ÍO se encuentra dentro de las primeras lunas de Júpiter que descubrió Galileo Galileí, conjuntamente con Europa, Calisto y Ganímedes, por lo que se le denominan Lunas Galileanas en honor a este connotado científico.
Este satélite ocupa el cuarto lugar en tamaño entre los más grandes que tiene el Sistema Solar. Antes que él están Titán satélite de Saturno, y Ganímedes y Calisto también satélites de Júpiter. Es, además, más grande que la Luna el satélite de la Tierra.
Se destaca por ser un objeto conocido en el Sistema Solar. Es muy seco y bastante activo en lo volcánico. Tiene un diámetro de 3.643 kilómetros.
Calisto
Es uno de los satélites que observó por primera vez Galileo en 1610. Ocupa el segundo lugar por su tamaño dentro de los cuatro satélites que más se conocen de Júpiter, luego de Ganímedes que es el tercero de mayor tamaño, en todo el Sistema Solar. También es el cuarto satélite de los que descubrió Galileo con respecto a su distancia de Júpiter.
Calisto tiene 4.821 kilómetros de diámetro.
Ganímedes
Satélite más grande que posee Júpiter y de todo el Sistema Solar. Su descubrimiento ha sido vital, junto con otros satélites del gigante Júpiter. Permitió a científicos como Galileo Galilei comprender que la Tierra no es el centro del Sistema Sol, sino que es el Sol.
Ganímedes tiene 5.268 kilómetros de diámetro.
Amaltea
Es la quinta luna mayor de Júpiter con un diámetro de 167 kilómetros. Es más pequeña que los satélites Ganímedes, Io, Europa y que Calisto. Su órbita se halla dentro de estas cuatro lunas y su eje mayor siempre apunta a Júpiter.
El color de su superficie es oscuro quizás por el azufre que se desprende de Io. Amaltea no tiene forma esférica porque no posee la suficiente masa para que su gravedad interna le haga ver redonda. Fue descubierta en 1892 por Edward Barnard, astrónomo estadounidense.
