El comensalismo es conocido como una interacción biológica que se da entre individuos de diversas especies. Igualmente se caracteriza en que alguno de los organismos es beneficiado a partir del contrario, sin que éste último se perjudique pero que tampoco se beneficie, es decir, resulta un proceso neutral para el sustrato y provechoso para el receptor.
Si bien, cada uno de los beneficios se pueden considerar proalimenticios, es decir, que puede relacionarse con la alimentación de cualquier ser. Este proceso biológico es dado en muchas especies, como parte de los ejemplos de comensalismo están las situaciones de las aves carroñeras, las cuales utilizan los restos de presas de otros animales para llevar a cabo su alimentación propia.
También está el comensalismo dado muy frecuentemente en los peces denominados rémoras, donde suelen adherirse a la superficie de los tiburones a partir de una ventosa o una pequeña área dispuesta en su cabeza, logrando alimentarse de los restos de las comidas que ha ingerido dicho tiburón previamente. El organismo que emitirá el alimento al receptor será conocido como hospedero y el que lo recibe es el comensal.
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Características del comensalismo
Las características del comensalismo se centran en que su descripción se da como (+/0) dependiendo de si la especie como el comensal se beneficia al recibir el alimento propiamente dicho, o bien algún otro recurso del hospedero.
A diferencia del hospedero, la cual es la segunda especie y que se identifica porque no se perjudica, pero tampoco se beneficia al momento de ejecutar el proceso biológico en cuestión.
Por otra parte, la definición de comensalismo también se ha destacado por ser un tipo de simbiosis, involucrando una relación cercana de convivencia durante un tiempo prolongado que compromete a los dos integrantes de la interacción. En un buen número de casos, la relación es tan estrecha que el ser comensal está adaptado a usar siempre como hospederos a seres de la misma especie u origen.
3 ejemplos de comensalismo.
Percebes-Ballenas.
En estas situaciones la explicación del comensalismo se determina en que los percebes, crustáceos sésiles pequeños, no logran desplazarse por sí solos, se adhieren efectivamente a la superficie de la piel de las ballenas, siendo transportados en aguas que constan de grandes cantidades de nutrientes en las cuales se alimentan las ballenas y, en segunda instancia, los pequeños crustáceos.
Arbol-Ardilla.
El ser hospedero viene siendo el árbol, el cual funciona como un recurso dador que otorga agujeros naturales ideales para que los comensales, en este caso las ardillas, logren habitar, descansando, guardando su alimento e incluso teniendo un ambiente para proteger a las crías.
Pinzón carpintero-cactus.
El ave especial de las islas Galápagos funciona como el comensal al recurrir a las espinas desechadas constantemente por los cactus para poder atrapar insectos que se encuentran localizados en agujeros aledaños.
Cada uno de estos ejemplos radican en la explicación del comensalismo que ayudan de una u otra manera a sobrevivir al ser comensal sin perturbar la vida e integridad del hospedero, pero si funcionando como benefactor para el primer ser no solo con alimento, sino también como medio protector de sí mismo.