Soñar es un proceso natural, pero, al mismo tiempo, asombroso y cargado de incógnitas. Cada noche, todo un universo onírico se despliega ante nosotros. Sobre todo durante la fase REM, que es en la que experimentamos los sueños más vívidos, aunque bien es cierto que se sueña en todas las fases del sueño.
Hay quienes, a estas imágenes, sentimientos y sensaciones, le atribuyen un componente místico.
Otros lo ven, desde el punto de vista de la psicología, como una expresión de necesidades reprimidas, seguramente influenciados por las controvertidas teorías de Sigmund Freud, tan admirado por unos y tan denostado por otros.
Por contra, algunos científicos consideran que los sueños no son más que la consecuencia de un proceso natural de reorganización de pensamientos que se lleva a cabo mientras dormimos.
Sea como sea, el fin del presente artículo no es dilucidar el significado de los sueños, ni desentrañar qué voces son las que poseen la razón, si es que alguna de ellas la tiene. Y es que, al no haber de momento una evidencia científica definitiva acerca del asunto, no tenemos aún una respuesta a esa pregunta.
Nuestra pretensión es crear una clasificación de los tipos de sueños más comunes. Sueños lúcidos, recurrentes, de falso despertar… algunos pueden durar apenas unos segundos, y otros extenderse incluso más allá de una hora. Su tipología es muy variada e interesante. Veamos más a continuación.
Indice
Sueños ordinarios
El movimiento ocular rápido o fase REM, una de las cinco etapas del sueño, es la etapa en la que ocurren los sueños ordinarios. Se caracteriza por ser un sueño que se genera por ideas. En este sentido, el conocimiento, las emociones, las ideas, así como los sucesos diarios se almacenan en nuestra mente.
Los recuerdos casuales que se almacenan en la memoria a largo plazo pueden transformarse en sueños en los que una persona puede verse volando en un avión, escalando una montaña o dando un discurso en público.
Estos sueños pueden estar basados en imágenes y carecer de una narrativa clara o una interpretación directa. Por otra parte, una persona puede tener, como media, de tres a cinco sueños cada noche.
Además, en este tipo de sueños no es inusual olvidar lo soñado a la mañana siguiente, o descubrir que el recuerdo aparece fugazmente en el instante en que te despiertas.
Ensoñación
Cuando una persona sueña despierta, sus ideas desvían su atención del mundo exterior y hacen que se vuelva menos consciente de su entorno. En reacción a la falta de estimulación, la red de modo predeterminado en el cerebro crea sueños cuando la persona permanece despierta. La disforia, el escapismo, la fantasía, la rumiación y la visualización son algunos ejemplos de ensoñación.
Sueños curativos
Los sueños en los que se puede curar a otros o poseer habilidades sobrenaturales como la telequinesis o la telepatía, se conocen como sueños curativos. Cuando se sueña de esta manera, es posible experimentar una sensación de armonía y paz. Este tipo de sueños pueden ayudarte a usar tu mente subconsciente para crear una sensación de calma o propósito.
Sueños de falso despertar
Estos suceden cuando una persona cree que se ha despertado de un período de sueño, pero en realidad todavía está soñando. Los sueños de falso despertar son como un estado «híbrido» que existe entre la conciencia y el sueño. Además, a menudo se relacionan con los sueños lúcidos o la parálisis del sueño.
Pesadillas
Los sueños en los que una persona experimenta temor, se consideran pesadillas. Los malos hábitos alimenticios, las experiencias traumáticas previas, las enfermedades, así como la falta de sueño y los problemas para dormir, son algunas de las razones típicas por las que se tienen pesadillas.
Sueños lúcidos
Otra clase de sueños relativamente común es el sueño lúcido. Se trata de un sueño en el que la persona es consciente de que está soñando y, hasta cierto punto, tiene control sobre lo que sucede en ellos.
Lo cierto es que existen ciertas técnicas o entrenamiento para lograr tener sueños lúcidos, algo que suele resultar tremendamente estimulante por la sensación de poder moldear el mundo que te rodea a tu voluntad, a la par que experimentar una realidad distinta y cargada de emocionalidad.
Sueños recurrentes
Tal y como su propio nombre da a entender, los sueños recurrentes son aquellos que hemos tenido repetidamente a lo largo de uno o más periodos de sueño.
Las pesadillas recurrentes son otro tipo de sueño repetitivo en el que aparecen imágenes y sentimientos negativos iguales o similares a episodios anteriores.
Sueños proféticos
En un sueño profético, se es testigo de sucesos futuros antes de que sucedan en la realidad. Algunas personas piensan que este tipo de sueños indican que un individuo ha realizado predicciones futuras; otras, que es simple casualidad o parte de la tendencia del ser humano de relacionar unos hechos con otros, focalizando selectivamente nuestra atención en las coincidencias y obviando las discordancias.
También hay quienes creen que, cuando tenemos sueños proféticos, el subconsciente nos está preparando para un resultado probable, como si de un entrenamiento se tratara.
